martes, 29 de enero de 2013

QUERIDO PABLO HERNÁN: 12 AÑOS DE LEYENDA



Por Roberto Pichardo

Hoy te recuerdo más que cualquier día del año. Nunca te ví jugar, era muy pequeño para recordarlo, y mas sin embargo cuando escucho tu nombre se me rosan los ojos. 

Hace ya 12 años de tu inocente partida, mas no de tu adiós. Sigues aquí, vistiendo los colores de nuestro equipo, en los corazones de la afición y en las mentes de jugadores que vienen y van. Todos quieren seguir tu ejemplo, tu carisma, tu liderazgo y sobre todo convertirse en leyenda como el '20' tuzo hizo en vida y en trascendencia.

En 1999 llegaste a Pachuca, te pusiste la capa de superhéroe y la casaca de campeón. Fuiste uno de los históricos jugadores que lograron levantar el trofeo de monarca del balompié azteca en nombre de los Tuzos, por primera vez en la historia. Con este gran logro grabaste tu nombre con letras de oro en la institución.

Seguiste jugando, luchando, sufriendo y gozando por la causa blanquiazul. Te ganaste la admiración y reconocimiento de la gente con tus grandes goles y tus carismáticos festejos. 

Y luego vino tu deceso. Tan repentino como el anochecer, pero tan impactante como el amanecer. No terminaba la vida y la carrera del delantero árgentino de 24 años de edad, sino comenzaba la leyenda de Pablo Hernán Gómez, dorsal número 20 del Club de Futbol Pachuca, hoy y para siempre.

Ese eres tú, querido Pablo. El que tuvo un trueque con la vida al cambiar un par de tenis por un par de alas. El que representa a Pachuca en la selección celestial y defiende a su equipo en las buenas y en las malas. El que determinó que nunca más se volvería a usar el número 20 en una playera de los Tuzos, porque ese, ese es el dorsal de Gómez.

Gracias Pablo Hernán, por haberlo dado todo por tus colores, por haber sido parte de ese histórico grupo campeón de 1999, por habernos regalado la esperanza de creer que hay alguien allá arriba, jugando para El Gran Jefe, y que se hizo presente en todos y cada uno de los logros obtenidos.

Fuiste parte de la historia, eres parte de una maravillosa leyenda, y sobre todo, siempre serás parte de mi corazón.

Descanse en paz, Pablo Hernán Gómez. Amado padre, esposo, futbolista y ser humano. 20 de diciembre de 1977, Mendoza, Argentina – 29 de enero de 2001, Ixmiquilpan, México.

¡Gracias campeón! ¡Siempre te recordaremos!

 

1 comentario:

  1. Nada como un excelente redactor para un inolvidable suceso. Mejores palabras no hubiera podido emplear para expresar lo que fue y será Pablo Hernán para la familia tuza, aquel héroe blanquiazul que vivirá por siempre en nuestros corazones.

    Una gran felicitación al blog que nota tras nota, domingo tras domingo nos sorprende con la forma de convertir un hecho deportivo grandioso en algo único. ¡FELICIDADES Y SIGUE ASÍ!

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